La crisis hospitalaria del Valle del Cauca demanda decisiones de fondo por parte de la Gobernación. Son pocos los Municipios que ofrecen servicio nivel II y las casas de salud que lo tienen están en crisis debido a la situación financiera que presentan.

 

El Hospital Departamental de Sevilla y el Tomás Uribe de Buga, serían los de mostrar en su gestión administrativa. El más grave es el de Buenaventura que lleva  cinco años sin superar la crisis y está en un marco de inviabilidad, a  él se suma el HUV de Cali, que demanda una restructuración que ya se ha planteado en junta.

 

El caso hospitalario de Buenaventura, según el propio secretario de Salud del Valle, Fernando Gutiérrez, es complicado. “No hay viabilidad financiera, por tanto urge una reunión en Buenaventura con las fuerzas para replantear la red hospitalaria del Puerto”.

 

Gutiérrez considera que en Buenaventura en materia de salud, “no ha habido gestión administrativa y la burocracia superó la demanda del servicio comparado con el nivel asistencial”. Hay embargos por 2 mil millones de pesos en el Hospital de Buenaventura, “pero no se han adoptados medidas”, explica el secretario de Salud del Valle.

 

La facturación de manera manual y tardía, el cobro inadecuado de cartera y la falta de administración, conlleva a que los hospitales se llenen de cuentas que finalmente generan el déficit, y los lleva a un marco de inviabilidad.

 

De 11 Hospitales, ocho en el Valle del Cauca están en crisis por esas causas. Allí se incluye al Hospital Universitario del Valle Evaristo García, que atiende los niveles III y IV. “Es inviable el HUV en las condiciones en que funciona, debido a su pasivo que supera los $150 mil millones acumulados, y unos ingresos por servicios  que no alcanza los 3 mil millones de pesos, mientras que la nómina está en el orden de los 8 mil millones de pesos. “Es decir que se gasta más de lo que ingresa”, anota el Secretario de Salud del Valle del Cauca.

 

“Una opción, pero con soporte técnico, es reducir la nómina del HUV, analizando cada servicio para no afectar a la comunidad”, afirma Fernando Gutiérrez. A la fecha en el Hospital Departamental hay 1.200 personas contratadas por cooperativas.

 

Otra labor fundamental es poder cobrar la cartera, que en algunos casos supera los 365 días.