Édison Ruiz, alcalde encargado de Buenaventura 

 

El último día del periodo de sesiones ordinarias del Concejo Distrital de Buenaventura, el viernes 30 de noviembre de 2018 en horas de la tarde, el alcalde encargado Édison Ruiz, hizo presencia en las dependencias de la sala edilicia para cumplir con eso de ‘Primero el lobby’ que se reclama antes de la aprobación de proyectos transcendentales para el desarrollo de la ciudad.

 

Al final de la extensa reunión, no hubo acuerdo entre el mandatario y la mayoría de los concejales, quienes al no ser atendidos en sus pretensiones expuestas, desistieron de responder al llamado del presidente del Concejo, Jaime Andrés Olaya, para dar inicio a las sesiones, a pesar de encontrarse en la edificación.

 

El desarrollo de esta sesión tenía como propósito central sacar adelante el proyecto de la rebaja de los impuestos que debe pagar el Instituto Nacional de Vías, luego de adelantar reuniones sucesivas de orden jurídico con los funcionarios de la Procuradora Delegada para asuntos laborales; el Procurador Delegado para Asuntos Disciplinarios; representante de la Federación Nacional de Servidores Públicos; vicecontralor General de la República e incluso la misma ministra del Transporte, Ángela María Orozco, quien ha sido reiterativa en su decisión de no realizar ese pago.

 

Luego de insistentes llamadas y envío de mensajeros a los 11 concejales para que hicieran presencia en el salón de la plenaria, estos nunca se presentaron. Así que luego de haber transcurrido dos doras de espera, el presidente del Concejo procedió a clausurar las sesiones del tercer periodo de manera oficial.

 

Los concejales que respondieron a la convocatoria de la mesa directiva y estuvieron a la espera de sus compañeros de labores fueron: Jaime Andrés Olaya, Blenny Vallecilla, Beatriz Mosquera, Jorge Alonso Moreno, Henry Montaño, Wilson Rodallega, Ligia del Carmen Córdoba, Cirila Sánchez y Viviana Renteria.

 

Una vez protocolizada la clausura de las sesiones, ahora sí se hicieron presente los concejales 'disidentes' que permanecieron en sus cubículos del primer piso.

 

Con el beneplácito del primer vicepresidente Hermógenes Micolta, se instaló la sesión de los concejales disidentes que para esa hora contaban con las mayorías, quienes procedieron a aprobar tres proyectos.

 

El presupuesto general de rentas, recursos de capital y apropiaciones de la vigencia fiscal 2019, cuyo monto esta por los $ 573 mil millones.

 

Por medio del cual se crea el Consejo Territorial de Paz, Reconciliación y Convivencia en el Distrito, que se hundió en las sesiones extras del 20 de septiembre debido a que el alcalde no hizo ‘el lobby’.

 

Por medio del cual se crea la biblioteca pública en la localidad 2.

 

El proyecto de la rebaja de los intereses a los impuestos del Invías, no fue tratado en la sesión de la ‘disidencia’, porque no hubo acuerdos con el alcalde para su aprobación.

 

El ejecutivo no sancionará los proyectos de acuerdo aprobados por los concejales ‘disidentes’ debido a que su trámite fue realizado una vez se clausuraron las sesiones oficiales.