SNTT denuncia despidos masivos y persecución sindical en terminales portuarias de Buenaventura

El Sindicato Nacional de Trabajadores del Transporte (SNTT), Subdirectiva Buenaventura, denunció una serie de despidos injustificados y persecución laboral contra trabajadores sindicalizados en las terminales portuarias del distrito. Según sus dirigentes, las empresas estarían usando estrategias psicológicas para presionar a los empleados a renunciar y así evitar procesos legales por despidos masivos.
Pedro Alejandro Rivas Caicedo, presidente de SNTT Buenaventura, señaló que “ha sido bastante paupérrimo lo que tenía que ver con esta mesa de diálogo, que ayer inclusive se saturó nuevamente porque no hubo acuerdo por los despidos masivos que se están presentando”.
Rivas Caicedo también afirmó que “la empresa está trabajando psicológicamente a los trabajadores para que renuncien, y de una u otra forma buscar que no se vea como un despido masivo”, denunciando que ya hay más de cuatro personas forzadas a salir de la empresa.
Por su parte, John Edward Espinoza, secretario de Asuntos Portuarios del sindicato, indicó que “en la Terminal TCBUEN, todos los directivos son del interior del país”, lo que calificó como una falta de oportunidades para los jóvenes bonaverenses. “Necesitamos que las oportunidades sean para los nuestros, que sí estamos preparados”, recalcó.
El sindicato denunció que solo en el área de mantenimiento se han producido alrededor de 25 despidos, y que la empresa se ampara en su interpretación de la Constitución para justificar las terminaciones sin justa causa. “Se ratificaron el día de ayer que seguirán en su derecho de despedir sin justa causa”, afirmó Espinoza.
Desde SNTT aseguraron que ya están preparando una huelga por solidaridad, respaldados por organizaciones internacionales como ITF y FTT. “Somos un sindicato de industria y tenemos personal en todos los puertos del país”, recalcó Rivas.
Finalmente, expresaron su preocupación por la lentitud del Ministerio de Trabajo para responder a las querellas. “La burocracia en Colombia es muy alta y una querella sale en cinco o seis años. Las únicas multas que les han puesto a TCU fueron en 2018 y ni siquiera las han pagado”, concluyó Espinoza.