Unos 30 metros de terreno, 20 de ellos al borde la línea férrea, fueron arrasados a una profundidad de cuatro metros donde cayeron desprendidos de sus uniones tres tramos de la tubería de 16 pulgadas que abastece de agua potable a los barrios de las comunas 9 y 10 de Buenaventura.

 

Con las lluvias caídas durante el fin de semana se crecieron las fuentes de agua de Escalerete, Dagua, San Cipriano y las quebradas que como la de El Venao provocaron el arrastre de material vegetal, piedras, árboles y barro que taponaron algunos sectores de los cauces y el deslizamiento de varios puntos en la ribera.

 

Uno de los sectores, el más crítico, fue en el kilómetro 19,8 del corregimiento de Córdoba, sobre el corredor férreo, por donde la entrada del agua arrasó la bancada y desprendió 30 metros de la tubería matriz que conduce el agua que se trata en la planta sobre el río Escalerete.

 

Desde la mañana de hoy, el gerente de Hidropacífico S.A. E.S.P., Gustavo Adolfo Duque, lideró la coordinación con operarios y proveedores que iniciaron de inmediato los trabajos de reconocimiento y limpieza del sitio para iniciar la estabilización del terreno, hincar las bases en rieles e instalar nuevamente los tramos de las tuberías para iniciar el proceso de restablecimiento del servicio.

 

Estas actividades, según cálculos de los ingenieros, pueden consumir más de 30 horas de trabajo, si las condiciones ambientales se mantiene favorables, es decir si no llueve en el lugar.

 

Los trabajos de recuperación de la bancada son coordinados con personal adscrito a Ferrocarril del Pacífico que esperan reanudar operaciones lo más pronto posible, pues desde las 11:00 de la noche no han podido transitar los trenes que mueven entre 200 y 700 toneladas de peso.

 

Entre tanto, la comunidad será abastecida a través de carrotanque.