El Valle del Cauca nunca debió clasificarse en categoría especial para la vigencia 2016, dijo el contralor departamental José Ignacio Arango Bernal, al presentar ante la comunidad su informe de rendición de cuentas año 2016 sobre las auditorías realizadas al ente departamental en el período 2015.
El contralor destacó que el diagnóstico ha servido para que la actual administración de la gobernadora Dilian Francisca Toro haya implementado planes de mejoramiento en aquellos aspectos que se requerían.
En su informe, el Contralor señaló que “de acuerdo con la certificación expedida por la Contraloría General de la República para la vigencia 2014, la relación porcentual entre ingresos corrientes de libre destinación y sus gastos de funcionamiento fue de 52.2 %, lo cual clasificaba al departamento en categoría primera y no en la especial, de acuerdo con la normatividad vigente”.
Precisó que “este resultado entregado por la Contraloría departamental originó que el Tribunal Contencioso Administrativo mediante fallo del 8 de septiembre de 2016 ratificara que el departamento debía conservar la categoría primera y ordenara la suspensión del decreto 1516 del 28 de octubre de 2015, mediante el cual se había otorgado la categoría especia”, sostuvo el contralor Arango Bernal.
A su vez, la gobernadora Dilian Francisca Toro Torres afirmó que la Contraloría le hace un diagnóstico a las entidades administrativas para que hagan planes de mejoramiento y en esos planes por supuesto se disminuyan todos los problemas administrativos y fiscales que se puedan presentar en los departamentos y en los municipios, “Eso ha servido para que este año, con ese diagnóstico, hayamos mejorado muchas cosas en el departamento del Valle del Cauca”, aseguró la mandataria.
Indicó que “el contralor ya había establecido en su visita que estábamos en categoría primera. Ahora estamos en categoría primera y el próximo año esperamos poder llegar a categoría especial”, dijo Toro Torres.
Dentro de las auditorias hechas por la Contraloría se encuentran la evaluación, seguimiento y objeto del contrato de distribución entre la Industria de Licores del Valle y el consorcio Suprema, la auditoría al Municipio de Jamundí a la gestión fiscal por calamidad y la evaluación a presuntas irregularidades en el Programa de Alimentación Escolar en el Departamento del Valle del Cauca.
La Contraloría indica que “dada la situación financiera de la ILV nos vimos en la necesidad de realizar una visita fiscal y una auditoria regular a la vigencia 2015. Como resultados de estas acciones de control se identificaron, de manera general, hallazgos como el establecido al contrato firmado con el Comercializador Suprema que no cumplió con las metas de ventas anuales pactadas, ocasionando una disminución de los ingresos para cubrir los gastos fijos de la empresa”.
“En el año 2015 se vendieron sólo dos millones 800 mil botellas, para el 2016 se aprecia un ascenso en las ventas que esperamos verificar cuando hagamos la auditoría del 2016”, dijo el Contralor. Por su parte, la Gobernadora resaltó que “en el 2016 vendimos entre 9 y 10 millones de botellas que nos sirvió para aumentar nuestros ingresos en un 21 %”.
José Ignacio Arango también se refirió al Hospital Universitario del Valle y señaló que las auditorías realizadas por su despacho a contratos por tercerización, entre otros, arrojaron 23 hallazgos administrativos, penales y fiscales que sirvieron de insumo para que el departamento tomara acciones correctivas con el centro hospitalario, como acogerse a la Ley 550 y ajustar su planta de empleados.
En cuanto al Programa de Alimentación Escolar, indicó que se hicieron visitas para la verificación de la operatividad del programa en instituciones educativas de municipios como Andalucía, Bugalagrande, Pradera y, además, el municipio de El Cerrito que motivó la visita por el hecho de intoxicación, en su momento, de un grupo de estudiantes.
“Con estos resultados, el departamento determinó hacerle seguimiento a la contratación y a la interventoría del Programa PAE”, concluyó el contralor del Valle.
